Si bien en México existen aproximadamente 4.7 millones de empresas (estimado para 2021), una gran parte de estos negocios no tiene acceso a tecnologías básicas como PCs y servicios de internet. Con base en los datos del Modelo de la Demanda TIC, realizado por Select desde 1995, 38% de las empresas en México tiene por lo menos una PC y sólo 18% cuenta con conexión a internet fijo.
Figura 1: Adopción de tecnología en México.
Este bajo nivel de adopción tecnológica es una barrera a la digitalización de la economía y de los negocios, restringe las posibilidades de aumento de productividad, y aumenta las brechas entre negocios rezagados y avanzados: mientras los primeros realizan actividades y operaciones en papel, los avanzados continúan con sus agendas de integración de tecnologías avanzadas como nube, analíticos, automatización, inteligencia artificial, etc.
Son tres los factores que limitan la adopción:
-
Nulo poder adquisitivo; 95% de las empresas en México son micronegocios, de hasta 10 empleados con ingresos anuales de $322 mil pesos ($15 mil USD). De tal forma, que donde no hay dinero no hay tecnología, una relación que impacta negativamente la competitividad de las empresas con pocos recursos frente a un mercado global y digital.
-
Dispersión geográfica; de acuerdo con el INEGI, 98% de las poblaciones en el país tienen menos de 2,500 habitantes; un hecho estructural que mantiene lejos a los negocios más pequeños y rezagados de las innovaciones tecnológicas que se dan en las empresas basadas en las principales ciudades y zonas metropolitanas del país.
-
Cultura tecnológica; al estar distantes de la tecnología y de sus beneficios, es presumible que estas empresas rezagadas consideren poco relevante destinar recursos para tecnología y telecomunicaciones.
Son destacados los esfuerzos de la iniciativa privada, los operadores de telecomunicaciones, fabricantes multinacionales y cámaras locales, para acercar la tecnología a estos sectores rezagados mediante capacitaciones, aumento de cobertura y financiamientos; sin embargo, estas brechas aún existen, y se han vuelto muy evidentes durante los meses de confinamiento por la contingencia sanitaria de 2020 y 2021.
Además de recomendar apoyos gubernamentales, como el proyecto Internet para Todos; consideramos clave destinar recursos a la creación de modelos de negocios que permitan entregar servicios digitales a estas empresas mediante plataformas móviles, cuya adopción de smartphones ronda el 60%, y aumentar los niveles de adopción tecnológica disminuyendo las barreras y costos de entrada.
Algunas de las start-ups digitales son conscientes de esta oportunidad y lanzan servicios de negocio para acercar a proveedores y consumidores mediante plataformas digitales accesibles desde el celular: servicios de compraventa, envíos, logística, monitoreo de temperatura, gestión de cajas, etc.
¿Será posible que esta nueva ola de innovación disminuya las brechas tan profundas que existen en el país?